El Pregón de Rafael de Gabriel en 2004, revivió, sin duda alguna, el concepto de familia y de fe.
Todavía emocionado por los instantes vividos sobre las tablas del escenario, Amigo Vallejo se acercaba a los medios de comunicación con los ojos húmedos y describía con estas palabras lo escuchado momentos antes: «Ha sido un Pregón donde Rafael de Gabriel se ha sentido muy libre en su fe y en su concepto de Sevilla». Para el cardenal, el pregonero fue muy sincero en todo momento «ya que su texto está escrito sin ningún tipo de limitación, siendo magnífico en el fondo y la forma».
2 comentarios:
Vamos .......
Ahí, hay que morir.
Estoy intraquilo de pensar lo poco que queda pa cruzá er puente y poné a Sevilla en bocabajo repartiendo alegría y esperanza.
Besos al Comando Caballa.
Ya vamos a estar ahí!!!!!
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