miércoles, 26 de marzo de 2008

Juan Manuel Rodríguez Ojeda.









Se formó en el taller de las hermanas Antúnez, para independizarse posteriormente. En sus primeras creaciones sigue el esquema caracteristico de las labores de la segunda mitad del XIX, realizadas siempre sobre terciopelo oscuro. El palio de la virgen de la Estrella, de 1891, es un ejemplo de esta primera etapa. En la siguiente, el diseño de Ojeda cambió: los bordados se distribuyen de forma simétrica, ocupan la superficie entera del tejido y las caídas de los palios terminan en punta con flecos de elaborado dibujo. Las bambalinas, divididas por los varales, adquieren así una gran movilidad, al tiempo que ganan en lujo y vistosidad. El decorativismo modernista se hizo sentir en los palios, mantos, túnicas y sayas de Ojeda, que se cubrieron de motivos más pequeños y estilizados, a la par que empezó a emplear terciopelo de colores, como en el palio azul que bordó en 1902 para la Virgen de la Amargura o el de 1908, en rojo, para la Macarena, donde empleó el bordado sobre malla y los flecos de madroños, en lugar de los de seda sencillos.Sus creaciones, no sólo bordados sino también diseños de orfebrería, sientan los principios del llamado estilo cofradiero sevillano: recreación de motivos platerescos y barrocos con gran profusión, riqueza de los materiales y, sobre todo, una gran suntuosidad.

No hay comentarios: